Este
verano he pasado dos semanas en Suiza. La razón por la que he ido
este verano a Suiza es porque mi padre y mis tíos están allí
trabajando. A la vez que mis padres y mis tíos hay mucha gente de
Canillas que está allí por la falta de trabajo.
El
día de irme, nada más llegar al aeropuerto tenía muchas ganas de
entrar al avión. Pero estaba un poco nervioso. Era la primera vez
que viajaba en avión. El viaje fue genial, y las vistas desde el
avión eran muy bonitas. Cuando nos bajamos del avión fuimos a por
las maletas y después de cogerlas, por fin vi a mi padre.
Por
la tarde, fuimos con mis tíos al Centro Andaluz que está en
Schaffhausen. Y cenamos allí. Este bar me gustó mucho, porque tiene
cantidad de cosas del Real Madrid.
Al
día siguiente fuimos a ver las cataratas Rheinfall. Fue fantástico,
parecía como si el agua se nos viniera encima. Había una caseta con
cristales para ver las cataratas de diferentes colores. Más tarde,
fuimos a un castillo llamado Murods, que tiene unas vistas muy
bonitas de Schaffhausen. Al lado, había un parque donde se podían
coger castañas para echárselas a los ciervos que había a la
entrada del castillo. Después, nos fuimos a almorzar a una pizzería,
y dimos un paseo por el centro de Schaffhausen.
Stein
am Rhein es un pueblo muy pequeño, pero muy bonito, que visitamos
al día siguiente. Lo cruza el río Rhin, en el que nos bañamos. El
centro tiene muchas casas con fachadas muy bonitas de pinturas
antiguas. En lo alto del pueblo, había un restaurante con forma de
castillo. Para subir teníamos que pasar por un bosque con el camino
muy estrecho. Después, almorzamos en la casa de un amigo de mi
padre. Comimos una comida típica de Suiza, Raclette.
El
día siguiente fuimos a un mirador que tenía unas vistas muy
bonitas, se veía todo verde, justo debajo del mirador había unas
viñas muy grandes. Son diferentes a las de España. Las tienen
cubiertas por unas mayas y las uvas son negras. Después de comer,
vino a recogernos una amiga de mi padre. Me lo pase muy bien porque
nos llevó a un parque que tenía una tirolina.
También
mi primo nos llevó a un parque acuático llamado Alpamares. Allí me
tiré por muchos toboganes y también me bañe en piscinas. El
tobogán que más me gustó fue el Tornado y el Kinkone. Y la piscina
que me gusto fue la de olas. No tenía ganas de parar de tirarme.
Hemos
cogido el tren para ir a Zurich. Cuando llegamos allí, estuvimos
dando un paseo por el centro de la ciudad. Cuando mi tío terminó de
trabajar, vino a por nosotros a la estación para ir a Oberiberg.
Mientras mi tío se quedó en el bar que trabaja mi primo haciendo
una paella, nosotros fuimos a ver unos amigos y más tarde, nos
fuimos a disfrutar de la paella. Pasamos un rato muy bueno porque
había muchos amigos españoles.
También
asistimos a una misa que hay en Suiza, una vez al año, es una misa
española. Esta misa es en Inside. Hay una fuente en la que tienes
que beber de todos los caños la primera vez que vas.
El
día siguiente tocó volver para España. Por la mañana estuvimos
dando las últimas vueltas por el pueblo. Y por la tarde mi padre nos
llevó al aeropuerto. El viaje de vuelta fue genial.
Me
gustaría que hubiera trabajo en España, y mi padre volviera.
CARLOS MOYANO RUIZ - 2º ESO
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